Estos trastornos se refieren a un conflicto psicológico o a una condición psiquiátrica que puede manifestarse como un síntoma físico que no puede explicarse por una condición médica. En muchas circunstancias, los resultados de exámenes paraclínicos son negativos y no hay una causa establecida para los síntomas reportados.

​

La ansiedad es una característica común en el cuadro clínico de esta categoría de diagnóstico. Esto puede ocurrir ya sea porque es el problema principal o como reacción a una condición médica ya establecida asi como crisis en el entorno familiar. 

​

A medida que envejecemos, nuestro cuerpo se vuelve más sensible y tiene más dificultades para hacer frente al estrés emocional. La somatización sirve como un mecanismo para canalizar el conflicto emocional. Esta es una situación clínica que se presenta muy frecuentemente en la población de edad avanzada. El dolor es un síntoma muy frecuente que puede aparecer como parte de la somatización.

​

Es importante tener un diagnóstico preciso ya que en muchas ocasiones esta condición puede ser mal diagnosticada y a menudo tratada como una enfermedad médica, exponiendo al paciente a medicamentos que no están indicados y con el potencial de efectos secundarios.